SUBIDA AL PICO JABALCUZ (SUBBÉTICA JIENENSE – 1618 msnm.)
Hora de salida: 8’30 a. m. del polideportivo de Albolote
Distancia 21 km
Altitud inicio = 685 m.
Altitud final = 1.618 m.
Desnivel acumulado de subida = 933 m
Tiempo estimado = 7 horas
Dificultad media-alta
Nota: dificultad en función del desnivel, pues el piso es bastante cómodo y seguro.
Jabalcuz es un monte situado al sur de la ciudad de Jaén, a escasos kilómetros de ésta. Se sitúa
entre los términos municipales de Los Villares, Jamilena, Torredelcampo y Jaén, y su altitud es
de 1.618 msnm. El nombre procede del árabe yabal al-kūz (زوكلا لبج) o «Monte de la Jara».
Jabalcuz suele ser considerado erróneamente de manera popular como un volcán, siendo en
realidad una elevación caliza de origen sedimentario donde existen manantiales termales de
origen kárstico, cuyas aguas se calientan debido al gradiente geotérmico, dando lugar a
manantiales termales.
En sus laderas hay un Balneario, “Balneario de Jabalcuz”, que data del siglo XVII, que hoy se
encuentra cerrado y que está catalogado como Bien de Interés Cultural.
Partimos de la Urbanización Bellavista y subimos una fuerte pendiente de unos
doscientos cincuenta metros hasta llegar a la unión del Cordel de Jabalcuz con la Vereda
del Trompero. A partir de aquí, una sinuosa pista en suave pero constante ascenso, va
ganando altura y espléndidas vistas panorámicas, con un primer plano del Cerro de la
Fuente de la Peña, los Morteros y el Valle del Río Reguchillo. Abajo, un poco a la
derecha puede verse el Balneario de Jabalcuz. La subida discurre por la base de los
Crestones del Diablo hasta alcanzar el Collado de Aire a una altitud de 1.323 m. Aquí
las vistas empiezan a ser estupendas. Las provincias de Córdoba, Jaén, Almería,
Granada, quedan “casi” al alcance de la mano, pero en el horizonte pueden adivinarse,
en los lejanos perfiles montañosos, las de Sevilla, Ciudad Real, Albacete, etc.
Un último empujón y nos situamos en la cumbre (1.618 m). Si tenemos suerte y la
transparencia de la atmósfera nos es favorable, nuestra vista puede alcanzar un radio de
más de 200 kms., una infinidad de montañas y pueblos se ofrecen a nuestra vista. La
ciudades de Jaén, Torredelcampo, Torredonjimeno, Mancha Real, los pueblos de Los
Villares, Fuerte del Rey, Villargordo y otros mas pequeños, en un primer término. Más
lejos, Linares, Bailén, Úbeda, Baeza, Porcuna, Arjona, Andújar, etc. con el telón de
fondo lineal de la Sierra Morena cerrando un arco que deja a nuestras espaldas el
impresionante conjunto de los Sistemas Béticos.
Si nos giramos y nos ponemos mirando hacia el Sur, una línea de casi infinitas
ondulaciones nos muestra de derecha a izquierda el esplendor de los Sistemas Béticos.
Y empezamos a descubrir la Cordillera Subbética. Algunas de las más destacadas sierras
y serranías que la conforman discurren ante nuestra vista de oeste a este. Al fondo a la
derecha se insinúa el Torreón de la Sierra de Grazalema y Sierra de Lijar en la provincia
de Cádiz, la Sierra Horconera, Sierra de Alhucema, Sierra del Lobatejo y otras que
conforma las Sierras Subbéticas de Córdoba. El Aillo y La Caracolera, La Pandera, La
Martina de Alcalá Real, Sierra de la Grana de Torredonjimeno y otras subbéticas
jienenses al sureste de nuestro horizonte. La Sierra de Propios, La Sierra Mágina, el
Aznatín de Torres, la Serrezuela de Pegalajar, etc., completan un amplio arco en la
provincia de Jaen. Y un poco detrás se contempla la Subbética Granadina con la Sierra
de Parapanda, Sierra de Arana y de Huétor, etc.
Levantando aún más la vista nos podemos extasiar con la grandeza de la Cordillera
Penibética. Presidiendo el horizonte las blancas cumbres de Sierra Nevada, con el
Mulhacén, Veleta y Alcazaba con su silueta inconfundible. A su izquierda las Sierras de
Baza y Filabres. Un poco a la derecha las sierra de Almijara, Tejeda y Alhama. Más
hacia el oeste la Serranía de Loja, la sierras del Chamizo y Jobo, El Torcal de Antequera
y la Sierra de las Chimeneas. Ya muy a lo lejos se adivina la Serranía de Ronda y la
Torrecilla.
Nos giramos hacia nuestra izquierda y hacia el noroeste. Sobresalen las cumbres, ahora
nevadas, de las Sierras de Cazorla, Segura y la Villas ya en pleno Sistema Prebético. Las
sierras de Castríl, la Sagra y las Cabras asoman tímidamente.
Y así, casi mareados de tanta grandeza, tanta amplitud, tanta altura, tanta distancia y
tanto aire puro, podemos sentarnos a disfrutar de este regalo de la naturaleza en una de
las atalayas más privilegiadas que tiene Andalucía. Pocos lugares como éste podemos
encontrar en nuestra tierra donde poder tener una contemplación tan plena de su
conjunto y su diversidad. Lo único que tenemos que pedir es un poco de suerte para que
el día sea claro y la atmósfera transparente, que no nos dificulte la visión de la lejanía.
A partir de aquí, sólo queda regresar. Bajaremos por el mismo camino de subida hasta
llegar al Collado del Aire. Y a partir de aquí tomaremos la Vereda del Pincho que nos
conduce, en suave bajada, por un agradable sendero entre bosquetes de pinos, cipreses,
cornicabras, majuelos, hasta pasar bajo el pico de la Pata del Caballo, y seguir en
dirección norte hasta nuestro punto de partida en la Vereda de Jabalcuz. |