Página del Club Senderista "El Bastón"

15/12/18-Cuatro caminos-Acequia Real- Llano de la Perdiz-Paseo del «Colesterol» y comida de Navidad

CUATRO CAMINOS-ACEQUIA REAL-LLANO DE LA PERDIZ-CAMINO DE LOS FRANCESES-PASEO “COLESTEROL” y comida de Navidad PDF Imprimir E-mail
CUATRO CAMINOS-ACEQUIA REAL-LLANO DE LA PERDIZ-CAMINO DE LOS

FRANCESES-PASEO “COLESTEROL”

-DIA: 15 de diciembre.

-RECORRIDO :circular.

TIEMPO: 4 horas.

-DIFICULTAD: moderada.

-HORA SALIDA: nueve y media.

-LUGAR DE SALIDA -.: bar cuatro caminos, carretera de la sierra 73.

-KM: trece y medio.

 

DESCRIPCIÓN E INFORMACIÓN

A la espalda del 4 caminos,cogemos una calle que conduce a la acequia Gorda y subimos por un barranco debajo del puente de la carretera al cementerio, llegamos a ella y vamos unos 200m bordeandola y disfrutando de las vistas de la vega de Granada hasta llegar al mirador del cerro de los Quijones.

Bajando unas escaleras,  nos conducen al Barranco del Abogado, por él ascendemos hasta encontrarnos con una meseta de olivos hasta llegar a la carretera de la Alhambra, , subiendo después hasta la Silla del Moro y continuaremos descendiendo un poco hasta llegar a la Acequia Real.

La  Acequia Real es una estructura hidráulica que abastecía de agua a todo el conjunto palaciego de la Alhambra y el Generalife.Tiene su origen con Muhammad I( Alhamar)patriarca de la dinastia Nazarí y primer constructor de la Alhambra.Se basó en las captaciones que los romanos habian hecho para lleva r el agua a las minas de oro de Cenes y en los conocimientos de sus ingenieros.Se nutre de las aguas del Darro, estando la presa en Jesus del Valle. A unos 3km, se bifurca en dos ramales: 1º la del Tercio( regaba las zonas más altas. Alijares, Dar Al-rus y silla del Moro) 2º la del Generalife, para el  palacio y patio de la Acequia. Despues se nificaban en el “Partidor del Fraile”, desde allí iba hacia la Alhambra cruzando un acueducto donde hoy se inicia la cuesta de los Chinos y entrando por la Torre del Agua.Contaba tambien con una red de acequias menoresy depositos que trasformaron un paisaje sin agua en una ciudad llena de jardines y vergeles.

A lo largo del tramo de acequia que recorremos nos asombrará las vistas de Granada y del valle del Darro. Al llegar a un punto donde nos aparecen tres caminos, cogemos el de la derecha el cual va subiendo por la ladera del cerro del Sol,  nos saldrá otra vereda que obviamos, siguiendo de frente hasta encontrar a la derecha otra cuesta que nos conduce al lano de la Perdiz. Bajando un poco,  el carril nos conduce al Algibe de la lluvia. Llevamos unas dos horas de recorrido y es el momento de tomar “la pieza de fruta”.

 

Seguimos bajando poor una vereda y al llegar al camino principal,giramos a la izquierda por el camino de la cadena hasta encontrar la bifurcación que lleva al llano, seguimos por el camino de Los Franceses que despues de unos cuantos zizageos , nos aparecerá un puente que incluso, quien tenga un poco de vertigo lo pasará sin problemas. Ala derecha vamos viendo bonitas vistas del balcón del Genil.

Seguimos el camino que llevamos, hasta que aparece otro camino de bajada por la  montaña de las antiguas minas de oro de La Lancha.

En el entorno periurbano de Granada,dede época de los romanos, el oro ha sido protagonista. Estos observarón que los desprendimientros de tierras les servían en bandeja importante volumen de material disgragado,ideales para la busqueda de recursos minerales. Cuando comprobaron que estos desprendimientos eran desencadenados principalmente por el agua, idearon sistemas para inducirlos ellos mismos.Así establecieron las formas de explotación mineral denominadas “Ruina Montium” provocando grandes desprendimientos mediante la inyección de agua a la montaña a traves de un intrincado sistema de pozos y galerias, éstas quedaban cegadas en su contacto con el exterior, de esta forma el agua introducida iba debilitando la consistencia de la roca y generando fuerte presiones  en el material hasta desencadenar un desmoronamiento súbito que producia un ruido ensordecedor. Eran las explosiones de la época ya que no se conocía la dinamita.

Este oro del entorno de la Lancha del Geníl,como hemos dicho, explotado en épocas romanas ( como describe magnificamente Plinio el Viejo). y despues por los franceses a  finales del XIX,ha sido bateado desde tiempos inmemoriables en los ríos Dauro( que da oro) y Genil. Hoy es fácil de reconocer la gran cicatriz de paredes verticales en la parte alta de la colina,quedando restos de galerias y pozos en la pared. Los agujeros más accesibles quedaron cegados durante la guerra civil para evitar que pudieran ser utilizados como regugios por los maquis.En la base de la colina se extiende toda la masa deslizada sobre la que se asienta el nucleo urbano de la Lancha del Geníl. El agua utilizada para inyectar a la mina procedia del rio Beas.Aún quedan algunos vestigios del antiguo canal romano que llevaba agua a la mina, por la parte superior de la colina.

Los rendimientos de esta mina,nada tienen que envidiar a los obtenidos por la mayor mina  a cielo abierto de oro del imperio romano:Las Médulas en León, hoy día un paisaje espectacular declarado patrimonio de la Unesco. La de Granada ha quedado en el olvido.. La concentración de la ley de oro es de 0.5 gr por metro cúbico.

La mina de la Lancha volvio a funcionar entre 1857 y 1877 por una empresa francesa.El procemiento seguido fue algo diferente al de los romanos y consistía en desmoronar  los cerros auríferos mediante un potente chorro de agua. Para ello costruyeron un canal( aún demominado canal de los Franceses y que trasportaba agua del rio Aguas Blancas)Este canal de 16km, tenia el orificio de salida en la parte alta de la explotación, soltaba un chorro de agua salvando un desnivel de 117m.Una vez disgragado el material, era conducido a un estanque en la base de la mina. Todas las construcciones se conservan parcialmente.

 

En los años setenta del siglo XX,hubo un intento de explotación por una empresa canadiense, de lo que queda los cuadrantes de muestreo en las rocas , perfectamente visibles.

Salimos de las  minas por la ermita hasta bajar a la carretera de Cenes.Frente a la gasolinera, cogemos un camino hacia el río, para desviarnos por la “ruta del colesterol”. Cruzamos el puente de madera y seguimos por dicha ruta hasta encontrar otro puente, que cruzaremos para llegar al 4 Caminos.

¡ Qué la disfruteis¡

Adelina, Edu,  Lola y Pepe.